miércoles, 16 de diciembre de 2015

Reorganizar el peronismo como eje del proyecto nacional y popular

“Será lo que queramos que sea”

Más de 700 mil personas auto convocadas se congregaron el 09/12/2015 en Plaza de Mayo, para agradecer y vivar a un gobierno de carácter nacional y popular que culminaba su mandato soberano. Una de las movilizaciones espontaneas más relevantes de las últimas décadas, generando un hecho inédito y sin precedentes, ya no sólo en nuestra patria, sino en la de muchos países. Los principales protagonistas fueron los denominados “empoderados”, simpatizantes y militancia de base que se pusieron al hombro la campaña proselitista del ballotage. 

La consigna que resonó y resuena en cada rincón del país, de ese circunstancial 49% del electorado es: “Resistiremos y volveremos”. En estos días, se generó otro movimiento tan masivo como novedoso en todo el país, el: “Resistiremos con aguante”. Fenómenos ambos, que rebasaron las estructuras internas partidarias y a la dirigencia misma. Si bien el peronismo conserva la mayoría de las gobernaciones, intendencias, comunas, sindicatos, organizaciones sociales, mayoría y quórum propio en el Senado de la nación y primera fuerza política junto a aliados en Diputados; el haber perdido el Poder Ejecutivo Nacional, condicionará temporalmente la continuidad del desarrollo del proyecto nacional, proyecto que comenzara aquí, en el entonces pueblo de Santa Fe de la Vera Cruz, con la “Revolución de los siete jefes”, allá por el año 1580, primera revolución “criolla”, 230 años antes de la Revolución de Mayo. Las causales del revés electoral, son para el análisis y debate de las fuerzas que integraron el gobierno saliente, a modo de aprendizaje y superación. Lo concreto es que hoy gobierna una alianza que se autodenominó “Cambiemos” y que en los pocos días que lleva de mandato, está desarrollando lo que expreso que iba a hacer: Entre otras medidas, aumentar tarifas de servicios, quitar retenciones con las que se financiaba a las provincias y municipios, abrir las importaciones, tomar crédito externo (Nueva deuda), liberar el dólar, devaluar, hacer recortes en educación (Del 6 al 3 % del PBI) y hasta lo que no anunció y ya generó una “grieta” en su propio seno, poner jueces de la Corte Suprema de Justicia por Decreto, sobrepasar también mediante decretos, leyes aprobadas por el Congreso Nacional. Panorama integral este que preocupa tanto a trabajadores, como a empresarios, docentes, comerciantes y ciudadanía en general. Ya se comienzan a escuchar voces de quienes votaron a “Cambiemos”, decir que este no era el “cambio” que imaginaban, pero no deberían sentirse defraudados, ya que el ahora Presidente M. Macri, durante su campaña explicitó esas propuestas claramente y ahora son una realidad, mientras en las plazas y calles del país ya comienzan las movilizaciones populares en defensa de los derechos adquiridos, lo que significa que lo que “cambió” es el gobierno nacional y las consecuentes medidas políticas y no la conciencia de las conquistas sociales logradas en estos años. Es momento propicio, por ende, reorganizar y unir a todas las fuerzas del campo nacional y popular, en una multisectorial amplia, que coordine y estructure a todos sus actores, en pos de la defensa de los intereses colectivos y el retorno al gobierno, como garantía del proyecto de nación inclusiva que soñamos. El mayor desafío que enfrentamos es no permitir que nos dividan, que nos impongan liderazgos desde afuera, ligados al neoliberalismo (Proyecto estratégico en marcha, principalmente dentro del peronismo). 

Reorganización, decimos, que ya se comienza a desarrollar a lo largo y ancho del país y que aquí en Funes no debemos postergar. El justicialismo local es la sumatoria de muchas agrupaciones, que por sí solas, no reúnen la fuerza necesaria para incidir protagónicamente en nuestra realidad social, pero que juntas, unidas y organizadas, constituyen la mayor fuerza militante de la ciudad. De ahí que dividirnos constituye el histórico y claro objetivo de debilitamiento político al que aspiran intereses tanto de adentro como de afuera de la estructura. Debemos conformar una mesa de conducción partidaria colegiada, integrada por todas las agrupaciones, donde todos tengan vos y voto democrático, en un grado de igualdad horizontal. Esa será nuestra herramienta fundamental para la etapa que se viene y que ya estamos conformando y convocando a los que faltan. Y desde nuestra identidad partidaria, avanzar en un gran frente multisectorial, con las demás fuerzas políticas y sociales funenses, que nos posibilite ser reales protagonistas del destino común. Este es el gran desafío. “Sera lo que queramos que sea”.

Luis Reinoso - Santiago Maguire