sábado, 26 de marzo de 2016

Las repercusiones de un desafortunado discurso

Políticos y periodistas condenaron el discurso del secretario de Gobierno, que dijo que la señalización de la Quinta de Funes atraerá "turismo".

El acto que se llevó a cabo para señalizar la Quinta de Funes, uno de los centros clandestinos de detención más importantes de la última dictadura, trajo mucha tela para cortar. Es que el secretario de Gobierno Ezequiel Fernández Salvi tuvo un desafortunado discurso en el que habló de la supuesta función turística de la Quinta, lo que generó respuestas de todo tipo en las redes sociales.
Justo el día siguiente a que se cumpliesen cuarenta años del peor golpe cívico-militar de la historia argentina, Fernández Salvi dijo que "es irrespetuoso de nuestra parte hablar sin haber vivido la historia, porque a veces la historia hay que vivirla, creo que los que están apoyando este proyecto y nosotros, todos tenemos menos de 40 años, y como no vivimos esa historia es muy difícil saber y poder contarla". Justamente, la participación de la juventud es una de las cosas más celebradas por los militantes de los Derechos Humanos.
El secretario de Gobierno municipal expresó, además: "No queremos hacer un hecho político de esto, eso es fundamental" y remató su speech con los dichos más criticados: "Vamos a tratar de que Funes sea turística, desde la Municipalidad, y recordar este hecho, y tratar de fortalecer la quinta, es lo que vamos a hacer para que Funes sea turística y pueda reconocerse así como otros hechos que estamos teniendo".
Las repercusiones no tardaron en llegar: en Facebook la ofensiva más fuerte fue de los miembros del partido Unidad Popular, quienes fueron los motores del reconocimiento de la Quinta de Funes. Davo Rullo, militante de la UP, escribió que "no son burradas, son escalas de valores. El turismo (el negocio) está por arriba de la memoria, la historia y la gente. Y un acto por la memoria no es político, porque para ellos la política es otro nombre de los negocios". Mauro Miguez, ex concejal y referente de la UP, fue más sutil cuando expresó que "a los que creen que la política es mala palabra, asuman que no hay vida democrática sin ideologías, sin divergencia y contrapuntos". Otros vecinos compararon a Fernández Salvi con Darío Lopérfido (Ministro de Cultura de CABA, quien dijo hace meses que "no hubo 30.000 desaparecidos, fue un número que se arregló en una mesa cerrada") o simplemente descargaron su bronca por las declaraciones del funcionario.
Twitter fue otra plataforma cuyos usuarios no esquivaron el hecho. El concejal rosarino, referente del Movimiento Evita y secretario de la departamental Rosario del PJ Eduardo Toniolli ironizó escribiendo: "Funes: ciudad turística cuyo principal atractivo es el avistaje de boludos en cercanías de la Municipalidad".
Otros que hicieron referencia al tema fueron los periodistas Leo Ricciardino y Claudio De Luca. Ricciardino, por ejemplo, lo comparó con la reciente confusión del intendente de Quilmes Martiniano Molina entre una pregunta sobre el centro clandestino de detención "El Pozo" de Quilmes y los baches de dicho partido bonaerense.
“Eso de que si sos joven no podés entender la historia ... por qué no cierran un poco la boca! qué bronca tengo”, exclamó por su parte la periodista del diario La Capital, Florencia O`Keeffe.
En tanto, el diputado provincial Fabián Palo Oliver tuiteó: “Es increíble... Enoja...da tristeza...da impotencia. Como mínimo debería pedir disculpas a víctimas y familiares”.

Fuente: InfoFunes