sábado, 3 de septiembre de 2011

La decadencia radical

Impresentables e impunes son las declaraciones del Presidente de la UCR, Ernesto Sanz, quien salió a respaldar la decisión del candidato radical a gobernador de Mendoza, Roberto Iglesias, de llamar a cortar boleta.
“No es ir en contra Alfonsín, sólo se trata de fortalecer la postulación con el apoyo de otros sectores” intentó justificar Sanz en declaraciones radiales, y agregó “a los que critican a Iglesias, antes de hacerlo, que entiendan la particular realidad de la política mendocina”.

Indudablemente al carácter de lamentable que bien le cae al jefe del radicalismo ya por el hecho de no dar apoyo a Ricardito - recuérdese el candidato de su partido que el convalida a diario con su cargo partidario-, debe sumarse cuanto menos el de desorientado, producto real del masivo apoyo que recibiera la Compañera Cristina Fernánadez de Kirchner en las PASO.
Ahora bien, resulta un hecho inédito como el resto de los candidatos a cargos provinciales y espacios parlamentarios nacionales, han salido de forma ultra oportunista a intentar despegarse de su candidato a presidente, el que ellos otrora definieron acompañar y bancar.
Sin embargo, lo inédito del hecho no viene más que a confirmar el carácter profesional en términos politológicos de la UCR como partido, y la creciente decadencia que transita producto de ello.
Porque no es casual que las convicciones de los dirigentes que constituyeron el ideario radical, no aparecen en lo absoluto en la propuesta electoral y política actual del partido.
Y de la misma forma tampoco aparecen en cada uno de los espacios institucionales que ocupan.
Por el contrario, en unos y en otros aparecen defensas de las corporaciones que ahora le son afines, la practica ligada casi en exclusividad al arte de parecer y los juegos de los grandes medios, y por supuesto la salida oportunista e individual de cada uno de sus referentes ante cualquier mínimo momento de zozobra.
Así es el radicalismo actual y por ello funciona más como una federación de partidos provinciales en el mejor de los casos, que como un partido nacional con un ideario; y un proyecto a desarrollar para el conjunto del país.

Fuente: http://www.colnor.blogspot.com/