¿Hasta cuando más de lo mismo?
El miércoles pasado se votó favorablemente un aumento en la Tasa General de Inmuebles (TGI). La verdad es que no hace falta hacer un análisis profundo sobre esta situación, solo nos parece oportuno decir unas pocas palabras al respecto que aun nadie dijo públicamente.
Todo aumento puede ser justificado y siempre habrá argumentos para estar a favor o en contra de los mismos, pero lo que es una falta de respeto hacia los ciudadanos es que ante los medios de comunicación y en las sesiones monten un circo como el que montaron el miércoles con cruces y chicanas de un lado hacia el otro, y que luego a espaldas de los intereses de los ciudadanos trabajen conjuntamente en desmedro de estos.
¿Que es lo que se dijo sobre el nuevo aumento?
Que los Concejales Horacio Rímini, Abel Otaño y Federico Estella no levantaron la mano al momento de la votación; y Claudio Herrero, Liliana González y Norma Sassetti votaron favorablemente. Las dos últimas dándole su "voto de confianza" a la gestión de Mónica Tomei.
La elección finalizó empatada en tres y el voto doble de la Presidente del Concejo Norma Sassetti fue clave para que el proyecto fuera aprobado.
¿Qué es lo que NO se dijo?
Que si los Concejales Rímini, Otaño y Estella no daban quórum, no se hubiera podido sesionar y por ende no se hubiera aprobado el aumento.
Pregunta: Si estos Concejales no estaban a favor de dicho aumento, ¿para que fueron a dar quórum?
Esta situación -que pareciera ser una devolución de gentilezas hacia la futura Intendente- es similar a lo ocurrido en enero de este año cuando el Intendente Juvenal Rimini envió un proyecto al Concejo que contemplaba un aumento en las tasas Municipales y la Concejal opositora Mónica Tomei decía que era “un cachetazo a los vecinos”, que era “una falta de respeto a los contribuyentes”, etc, etc, etc... y luego se presentó a la sesión, dio el quórum requerido legalmente y se fue “enojada” antes de la votación. Como resultado, un Impuestazo sideral.
Si uno es “mal pensado” se podría decir que el riminismo está a favor del aumento (para no decir que hubo algún tipo de arreglo con la gestión entrante), porque si Horacio -hermano del Intendente actual- y Abel Otaño no daban quórum, no se hubiera podido sesionar y el proyecto hubiera quedado para ser tratado por los próximos Ediles. Es acá donde está la parte un tanto turbia que hace que uno sea “mal pensado” y desconfíe del accionar de quienes no levantaron la mano en la sesión del miércoles por estar, aparentemente, en contra de los valores en el aumento de la Tasa General de Inmuebles tal como pedía el Concejal Herrero.
Si verdaderamente Horacio Rimini, histórico dirigente Radical, no estaba de acuerdo con el proyecto impulsado por la Intendente electa Mónica Tomei, no creemos que no haya evaluado los posibles escenarios claramente favorables que se le iban a presentar después del 10 de diciembre con la nueva conformación del Honorable Concejo Municipal.
No hace falta ser estadistas políticos para saber que si el proyecto hubiera quedado para ser tratado por las nuevas autoridades, el riminismo hubiera contado con la mayoría necesaria para votar negativamente al aumento: Abel Otaño, Eduardo Casim y Horacio Rimini, además del joven edil justicialista Mauro Miguez que seguramente, del lado de los ciudadanos, no habría votado favorablemente. Hasta en el caso de un improbable empate, Rimini al ser el nuevo Presidente del Concejo, hubiera tenido la posibilidad de desempatar gracias a su voto doble. ¿Esa no hubiera sido la mejor estrategia política en favor del ciudadano Funense?.
¿Así es como justifican su rol de defensores de los intereses de los ciudadanos, para lo cual perciben una dieta exagerada?
Estas maniobras políticas debilitan a las Instituciones, generan desconfianza en los vecinos y llevan a un hartazgo social difícil de ocultar.
Una nueva falta de respeto que nos hacen a los Funenses. Pareciera que trabajaran en favor de intereses personales y por ende en desmedro de los intereses del pueblo, de nosotros los contribuyentes.
Su accionar deja en evidencia que son opositores pero de todos los que vivimos en esta ciudad.
Párrafo aparte para Liliana González y Norma Sassetti quienes acompañaron el proyecto dándole su "voto de confianza" a la gestión de Tomei. A las muy próximamente ex Concejales González y Sassetti: ¿Que pasó con el voto de confianza que les dieron en las elecciones municipales de 2007 los Funenses a ustedes?.
A la señora futura intendente Mónica Tomei le decimos lo que le repetíamos constantemente al Dr. Juvenal Rimini, no abuse de la suerte, el pueblo a la corta o a la larga hace justicia con aquellos que tienen un discurso que no va acompañado con acciones de gobierno. De todas maneras le deseamos mucha suerte en la gestión. Siempre hay tiempo para recapacitar y cambiar conductas, más aun en el caso de usted que está por iniciar su gobierno.
Mirar hacia atrás muchas veces es muy bueno, al menos para no repetir los viejos errores.
El miércoles pasado se votó favorablemente un aumento en la Tasa General de Inmuebles (TGI). La verdad es que no hace falta hacer un análisis profundo sobre esta situación, solo nos parece oportuno decir unas pocas palabras al respecto que aun nadie dijo públicamente.
Todo aumento puede ser justificado y siempre habrá argumentos para estar a favor o en contra de los mismos, pero lo que es una falta de respeto hacia los ciudadanos es que ante los medios de comunicación y en las sesiones monten un circo como el que montaron el miércoles con cruces y chicanas de un lado hacia el otro, y que luego a espaldas de los intereses de los ciudadanos trabajen conjuntamente en desmedro de estos.
¿Que es lo que se dijo sobre el nuevo aumento?
Que los Concejales Horacio Rímini, Abel Otaño y Federico Estella no levantaron la mano al momento de la votación; y Claudio Herrero, Liliana González y Norma Sassetti votaron favorablemente. Las dos últimas dándole su "voto de confianza" a la gestión de Mónica Tomei.
La elección finalizó empatada en tres y el voto doble de la Presidente del Concejo Norma Sassetti fue clave para que el proyecto fuera aprobado.
¿Qué es lo que NO se dijo?
Que si los Concejales Rímini, Otaño y Estella no daban quórum, no se hubiera podido sesionar y por ende no se hubiera aprobado el aumento.
Pregunta: Si estos Concejales no estaban a favor de dicho aumento, ¿para que fueron a dar quórum?
Esta situación -que pareciera ser una devolución de gentilezas hacia la futura Intendente- es similar a lo ocurrido en enero de este año cuando el Intendente Juvenal Rimini envió un proyecto al Concejo que contemplaba un aumento en las tasas Municipales y la Concejal opositora Mónica Tomei decía que era “un cachetazo a los vecinos”, que era “una falta de respeto a los contribuyentes”, etc, etc, etc... y luego se presentó a la sesión, dio el quórum requerido legalmente y se fue “enojada” antes de la votación. Como resultado, un Impuestazo sideral.
Si uno es “mal pensado” se podría decir que el riminismo está a favor del aumento (para no decir que hubo algún tipo de arreglo con la gestión entrante), porque si Horacio -hermano del Intendente actual- y Abel Otaño no daban quórum, no se hubiera podido sesionar y el proyecto hubiera quedado para ser tratado por los próximos Ediles. Es acá donde está la parte un tanto turbia que hace que uno sea “mal pensado” y desconfíe del accionar de quienes no levantaron la mano en la sesión del miércoles por estar, aparentemente, en contra de los valores en el aumento de la Tasa General de Inmuebles tal como pedía el Concejal Herrero.
Si verdaderamente Horacio Rimini, histórico dirigente Radical, no estaba de acuerdo con el proyecto impulsado por la Intendente electa Mónica Tomei, no creemos que no haya evaluado los posibles escenarios claramente favorables que se le iban a presentar después del 10 de diciembre con la nueva conformación del Honorable Concejo Municipal.
No hace falta ser estadistas políticos para saber que si el proyecto hubiera quedado para ser tratado por las nuevas autoridades, el riminismo hubiera contado con la mayoría necesaria para votar negativamente al aumento: Abel Otaño, Eduardo Casim y Horacio Rimini, además del joven edil justicialista Mauro Miguez que seguramente, del lado de los ciudadanos, no habría votado favorablemente. Hasta en el caso de un improbable empate, Rimini al ser el nuevo Presidente del Concejo, hubiera tenido la posibilidad de desempatar gracias a su voto doble. ¿Esa no hubiera sido la mejor estrategia política en favor del ciudadano Funense?.
¿Así es como justifican su rol de defensores de los intereses de los ciudadanos, para lo cual perciben una dieta exagerada?
Estas maniobras políticas debilitan a las Instituciones, generan desconfianza en los vecinos y llevan a un hartazgo social difícil de ocultar.
Una nueva falta de respeto que nos hacen a los Funenses. Pareciera que trabajaran en favor de intereses personales y por ende en desmedro de los intereses del pueblo, de nosotros los contribuyentes.
Su accionar deja en evidencia que son opositores pero de todos los que vivimos en esta ciudad.
Párrafo aparte para Liliana González y Norma Sassetti quienes acompañaron el proyecto dándole su "voto de confianza" a la gestión de Tomei. A las muy próximamente ex Concejales González y Sassetti: ¿Que pasó con el voto de confianza que les dieron en las elecciones municipales de 2007 los Funenses a ustedes?.
A la señora futura intendente Mónica Tomei le decimos lo que le repetíamos constantemente al Dr. Juvenal Rimini, no abuse de la suerte, el pueblo a la corta o a la larga hace justicia con aquellos que tienen un discurso que no va acompañado con acciones de gobierno. De todas maneras le deseamos mucha suerte en la gestión. Siempre hay tiempo para recapacitar y cambiar conductas, más aun en el caso de usted que está por iniciar su gobierno.
Mirar hacia atrás muchas veces es muy bueno, al menos para no repetir los viejos errores.
Redacción Funes Justicialista
