Castelar
Tres muertos y ciento sesenta heridos, es el saldo del accidente ferroviario ocurrido hoy a la mañana en cercanías a la Estación Castelar de la Línea Sarmiento.
Según se conoce el primer tren estaba frenado cuando otro lo embistió poco después de las siete de la mañana.
No es tiempo de arriesgar teorías o salir a echar culpas sobre lo ocurrido, pero sí me permitiré valorar el trabajo coordinado de fuerzas de seguridad; defensa civil; y áreas de salud, municipales; provinciales; y nacionales, que han logrado una rápida y efectiva asistencia a las victimas.
Dicho esto, se me vienen dos cosas a la cabeza.
La primera, una obviedad: No puede morir gente por viajar en tren, esto no puede pasar.
La segunda, una certeza: Necesitamos más Estado porque es el único con la capacidad para asumir las responsabilidades que le son propias e indelegables en materia de transporte, y en especial, si del sistema ferroviario se habla.
Fuente: Columna Norte
Randazzo sobre lo ocurrido en Castelar
Tres muertos y ciento sesenta heridos, es el saldo del accidente ferroviario ocurrido hoy a la mañana en cercanías a la Estación Castelar de la Línea Sarmiento.
Según se conoce el primer tren estaba frenado cuando otro lo embistió poco después de las siete de la mañana.
No es tiempo de arriesgar teorías o salir a echar culpas sobre lo ocurrido, pero sí me permitiré valorar el trabajo coordinado de fuerzas de seguridad; defensa civil; y áreas de salud, municipales; provinciales; y nacionales, que han logrado una rápida y efectiva asistencia a las victimas.
Dicho esto, se me vienen dos cosas a la cabeza.
La primera, una obviedad: No puede morir gente por viajar en tren, esto no puede pasar.
La segunda, una certeza: Necesitamos más Estado porque es el único con la capacidad para asumir las responsabilidades que le son propias e indelegables en materia de transporte, y en especial, si del sistema ferroviario se habla.
Fuente: Columna Norte
Randazzo sobre lo ocurrido en Castelar
El ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, habló hoy por la mañana con radio Del Plata, y se refirió a lo ocurrido ayer en cercanías de la estación Castelar.
“Pudo haber un accidente; hay accidentes todos los días”, manifestó, y explicó que existen “datos objetivos” como que “la formación mantuvo una aceleración ascendente y en ningún momento desaceleró”, y que “no se registró ninguna comunicación entre el motorman y la central de control” durante todo el recorrido hasta el momento del choque.
Sobre esto último aclaró: “Yo no estoy diciendo que el responsable es el motorman, sería una irresponsabilidad mía, lo que tratamos de trasladar son datos objetivos”, y agregó que “a más de 60 km, ni siquiera a esa velocidad hubiera podido parar en la estación de Castelar”.
También detalló que “antes que salga cualquier formación se hace un alistamiento y esta formación no recibió aviso de fallo ninguno, está firmado”, y expresó que es “necesario un cambio cultural si queremos tener el servicio que el pasajero se merece”.
Por otra parte, Randazzo señaló que “se trabaja todos los días muchas horas para mejorar el servicio”, pero que no se puede esperar “que en un año cambiemos lo que no se hizo en 50”.
Concluyendo, el Ministro dijo que “la gente que viaja todos los días necesita estar tranquila”, y que redoblará “la apuesta para hacer mejor el servicio”.
En este sentido, puntualizó que “hay un proceso de compra de 25 formaciones de 9 coches cada una que va a cambiar totalmente la prestación del servicio del Sarmiento”.
Sin dudas, las palabras de Randazzo ayudan a clarificar, a partir de algunos datos que estarán presentes en la investigación judicial.
No es novedad que durante las horas siguientes y aún ahora, se han dicho muchísimas cosas desde los distintos sectores opositores a fin de sacar rédito del doloroso suceso, que por lo menos, no se ajustan a lo ocurrido.
Dicho esto, es claro que la responsabilidad del Estado es indelegable en pos de transformar la red de FFCC en un país que la necesita, y a su vez, debe mencionarse que ello choca de lleno con intereses de varios sectores ocultos – más de un sindicato y sectores empresariales- a los que no les conviene el mínimo avance.
Fuente: Columna Norte
“Pudo haber un accidente; hay accidentes todos los días”, manifestó, y explicó que existen “datos objetivos” como que “la formación mantuvo una aceleración ascendente y en ningún momento desaceleró”, y que “no se registró ninguna comunicación entre el motorman y la central de control” durante todo el recorrido hasta el momento del choque.
Sobre esto último aclaró: “Yo no estoy diciendo que el responsable es el motorman, sería una irresponsabilidad mía, lo que tratamos de trasladar son datos objetivos”, y agregó que “a más de 60 km, ni siquiera a esa velocidad hubiera podido parar en la estación de Castelar”.
También detalló que “antes que salga cualquier formación se hace un alistamiento y esta formación no recibió aviso de fallo ninguno, está firmado”, y expresó que es “necesario un cambio cultural si queremos tener el servicio que el pasajero se merece”.
Por otra parte, Randazzo señaló que “se trabaja todos los días muchas horas para mejorar el servicio”, pero que no se puede esperar “que en un año cambiemos lo que no se hizo en 50”.
Concluyendo, el Ministro dijo que “la gente que viaja todos los días necesita estar tranquila”, y que redoblará “la apuesta para hacer mejor el servicio”.
En este sentido, puntualizó que “hay un proceso de compra de 25 formaciones de 9 coches cada una que va a cambiar totalmente la prestación del servicio del Sarmiento”.
Sin dudas, las palabras de Randazzo ayudan a clarificar, a partir de algunos datos que estarán presentes en la investigación judicial.
No es novedad que durante las horas siguientes y aún ahora, se han dicho muchísimas cosas desde los distintos sectores opositores a fin de sacar rédito del doloroso suceso, que por lo menos, no se ajustan a lo ocurrido.
Dicho esto, es claro que la responsabilidad del Estado es indelegable en pos de transformar la red de FFCC en un país que la necesita, y a su vez, debe mencionarse que ello choca de lleno con intereses de varios sectores ocultos – más de un sindicato y sectores empresariales- a los que no les conviene el mínimo avance.
Fuente: Columna Norte