martes, 26 de noviembre de 2013

Giros, pactos y ofrecimientos

 
A ver chicos, si nos ponemos de acuerdo.

Hasta ahora criticaban la expropiación de YPF porque era "una confiscación", porque a Repsol no se le había pagado nada por el 51 % de las acciones.

Si es una expropiación, hay que indemnizar y ponerse.

En todo caso era cuestión de discutir con cuanto, y ahí hay un dato insoslayable: Repsol arrancó demandando en el CIADI por 10.500 millones de dólares, y estiró la cifra (por otros reclamos) hasta los 15.000 millones de euros.

Y terminaría aceptando cobrar 5000 millones de dólares, e incluso crecen las versiones de que los famosos "activos líquidos" -por ser justamente tales- no incluirían participación en la explotación de Vaca Muerta.

Si se confirma, mejor así; más beneficioso aun será el acuerdo.

Pero aunque lo hayan calificado como una "confiscación", o aunque alguno piense o se le haya ocurrido que quedarnos con el control del 51 % de las acciones de YPF fuera gratis, recordemos que lo que el Congreso votó, fue una ley de expropiación.

Una ley (la 26.741), que tuvo 208 votos favorables en Diputados, y cuyos artículos 11 y 12 dicen lo siguiente:

"ARTICULO 11. — Los procesos de expropiación estarán regidos por lo establecido en la Ley 21.499 y actuará como expropiante el Poder Ejecutivo Nacional.

ARTICULO 12. — El precio de los bienes sujetos a expropiación se determinará conforme lo previsto en el artículo 10 y concordantes de la Ley 21.499. La tasación la efectuará el Tribunal de Tasaciones de la Nación."
.


No sea cosa que pase lo mismo que con el acuerdo con Chevron, en el sentido de que muchos votaron una ley que, al parecer, no leyeron; según se explicó acá.

Fuente: Nestornautas