Por Jessica Dos Santos Jardim*, desde Caracas.
Los medios de la derecha nacional e internacional buscan satanizar a Venezuela y su gobierno por los altos índices de "inseguridad". Las violencias que las corporaciones mediáticas apoyan y las buenas noticias que ocultan.
Durante estos casi tres meses de protestas violentas impulsadas por la derecha nacional e internacional, y apoyadas por distintos grupos económicos de poder en su conjunto, en Venezuela se han incrementado los índices de violencia a través de robos, secuestros, asesinatos y hasta cobros de peaje (la gente debe pagar para circular libremente por las calles) en los sectores de clase alta donde los manifestantes (muchos de ellos pagados) se han instalado a generar el caos. Ejemplo de estas zonas son el municipio Chacao y Baruta, perteneciente al estado Miranda, o la ciudad de San Cristóbal ubicada en el estado Táchira, fronterizo con Colombia.
En las últimas semanas se habla del municipio Chacao como "un campo de guerra", y han sido muchos los vecinos de la zona (muchos opositores al Gobierno) que muestran su enorme preocupación ante una extraña ola de robos y secuestros que se ha apoderado de la zona. Eso sin contar a las personas, de tendencia política desconocida, que se trasladan a bordo de motos y han fallecido degolladas por guayas (alambres de púas) que los manifestantes fascistas han colocado en autopistas y carreteras del país, donde también han arrojado grandes cantidades de aceite con lo que han generado un sinfín de accidentes.
En los estados Mérida y Táchira operan grupos entrenados por paramilitares y mafias enquistadas en universidades autónomas y derechistas, como la Universidad de los Andes, que hasta le cobran peaje a los ciudadanos de a pie: 300 bolívares para poder transitar de un lugar a otro sin verse agredidos por los manifestantes; 300 bolívares de ida y 300 de vuelta.
La inseguridad que nos ocultan
Cuando los grandes medios nos hablan de la inseguridad en Venezuela, nunca mencionan a los ladrones involucrados en la especulación o el acaparamiento de productos básicos. Tampoco se habla de los criminales que controlan el precio del dólar ilegal e incrementan el índice inflacionario del país; los que ocultan y engordan el valor de los carros, aquellos que hacen que los alquileres sean impagables y defienden el negocio criminal que mantienen las clínicas privadas al negociar con la salud del pueblo. Por eso, es necesario difundir las noticias que ellos nunca dirán:
- El dólar ilegal, que llegó a alcanzar los 90 bolívares por dólar, ha bajado drásticamente después de que el Gobierno bolivariano inaugurará el Sistema Complementario de Administración de Divisas (SICAD II) para controlar la venta de divisas a personas particulares.
- La inflación bajó de 3,3% en enero a 2,4% entre febrero y marzo ¡La segunda tasa más baja en los últimos doce meses! ¿Por qué? Porque el precio de los rubros agrícolas disminuyó un 7% debido a que el Gobierno logró mayores volúmenes de producción. Ahora se esperan mejores resultados porque todo indica que se pasará de 25 millones de toneladas de alimentos producidas en 2013 a 28,3 millones en 2014. Aún falta mucho en esta materia, pero al menos es un avance.
- El Gobierno ha lanzado "La tarjeta de abastecimiento seguro" y en tan solo unas semanas casi medio millón de personas la ha obtenido. La tarjeta, que ha sido satanizada por los medios de comunicación al compararla con la carta de racionamiento de la hermana nación de Cuba, permite adquirir gran cantidad productos básicos a costos mínimos en la red de abastos del Estado cada tres días, combatiendo así la mafia que revende y hasta contrabandea los alimentos.
- Venezuela logró estabilizar su sistema eléctrico, o al menos alcanzó la capacidad disponible de generación de 22.000 megavatios (MW) para atender una demanda que oscila los 17.600 MW.
¿Que todavía hay problemas por mejorar? Sí, por supuesto, muchísimos. Pero eso no justifica que los poderosos oculten las pequeñas victorias. Incluso los maravillosos resultados que obtuvo el país en los Juegos Suramericanos Chile 2014 (ODESUR), en la Feria Internacional del libro de Venezuela (FILVEN 2014) o en el maravilloso Festival de Teatro de Caracas, noticias que tampoco fueron reseñadas por las trasnacionales de la información. Pero no importa, nosotros seguiremos buscando maneras de romper el cerco comunicacional que nos imponen.
(*) Periodista venezolana @jessidossantos
Blog: http://jessicadossantos.tumblr.com/
Fuente: Marcha
Los medios de la derecha nacional e internacional buscan satanizar a Venezuela y su gobierno por los altos índices de "inseguridad". Las violencias que las corporaciones mediáticas apoyan y las buenas noticias que ocultan.
Durante estos casi tres meses de protestas violentas impulsadas por la derecha nacional e internacional, y apoyadas por distintos grupos económicos de poder en su conjunto, en Venezuela se han incrementado los índices de violencia a través de robos, secuestros, asesinatos y hasta cobros de peaje (la gente debe pagar para circular libremente por las calles) en los sectores de clase alta donde los manifestantes (muchos de ellos pagados) se han instalado a generar el caos. Ejemplo de estas zonas son el municipio Chacao y Baruta, perteneciente al estado Miranda, o la ciudad de San Cristóbal ubicada en el estado Táchira, fronterizo con Colombia.
En las últimas semanas se habla del municipio Chacao como "un campo de guerra", y han sido muchos los vecinos de la zona (muchos opositores al Gobierno) que muestran su enorme preocupación ante una extraña ola de robos y secuestros que se ha apoderado de la zona. Eso sin contar a las personas, de tendencia política desconocida, que se trasladan a bordo de motos y han fallecido degolladas por guayas (alambres de púas) que los manifestantes fascistas han colocado en autopistas y carreteras del país, donde también han arrojado grandes cantidades de aceite con lo que han generado un sinfín de accidentes.
En los estados Mérida y Táchira operan grupos entrenados por paramilitares y mafias enquistadas en universidades autónomas y derechistas, como la Universidad de los Andes, que hasta le cobran peaje a los ciudadanos de a pie: 300 bolívares para poder transitar de un lugar a otro sin verse agredidos por los manifestantes; 300 bolívares de ida y 300 de vuelta.
La inseguridad que nos ocultan
Cuando los grandes medios nos hablan de la inseguridad en Venezuela, nunca mencionan a los ladrones involucrados en la especulación o el acaparamiento de productos básicos. Tampoco se habla de los criminales que controlan el precio del dólar ilegal e incrementan el índice inflacionario del país; los que ocultan y engordan el valor de los carros, aquellos que hacen que los alquileres sean impagables y defienden el negocio criminal que mantienen las clínicas privadas al negociar con la salud del pueblo. Por eso, es necesario difundir las noticias que ellos nunca dirán:
- El dólar ilegal, que llegó a alcanzar los 90 bolívares por dólar, ha bajado drásticamente después de que el Gobierno bolivariano inaugurará el Sistema Complementario de Administración de Divisas (SICAD II) para controlar la venta de divisas a personas particulares.
- La inflación bajó de 3,3% en enero a 2,4% entre febrero y marzo ¡La segunda tasa más baja en los últimos doce meses! ¿Por qué? Porque el precio de los rubros agrícolas disminuyó un 7% debido a que el Gobierno logró mayores volúmenes de producción. Ahora se esperan mejores resultados porque todo indica que se pasará de 25 millones de toneladas de alimentos producidas en 2013 a 28,3 millones en 2014. Aún falta mucho en esta materia, pero al menos es un avance.
- El Gobierno ha lanzado "La tarjeta de abastecimiento seguro" y en tan solo unas semanas casi medio millón de personas la ha obtenido. La tarjeta, que ha sido satanizada por los medios de comunicación al compararla con la carta de racionamiento de la hermana nación de Cuba, permite adquirir gran cantidad productos básicos a costos mínimos en la red de abastos del Estado cada tres días, combatiendo así la mafia que revende y hasta contrabandea los alimentos.
- Venezuela logró estabilizar su sistema eléctrico, o al menos alcanzó la capacidad disponible de generación de 22.000 megavatios (MW) para atender una demanda que oscila los 17.600 MW.
¿Que todavía hay problemas por mejorar? Sí, por supuesto, muchísimos. Pero eso no justifica que los poderosos oculten las pequeñas victorias. Incluso los maravillosos resultados que obtuvo el país en los Juegos Suramericanos Chile 2014 (ODESUR), en la Feria Internacional del libro de Venezuela (FILVEN 2014) o en el maravilloso Festival de Teatro de Caracas, noticias que tampoco fueron reseñadas por las trasnacionales de la información. Pero no importa, nosotros seguiremos buscando maneras de romper el cerco comunicacional que nos imponen.
(*) Periodista venezolana @jessidossantos
Blog: http://jessicadossantos.tumblr.com/
Fuente: Marcha
