Por Dr. Luis Reinoso
Como sabemos, el tero es un animalito que pone los huevos en un lugar, y grita en otro. Esto lo hace para proteger el nido. Es su instinto de conservación que le hace repetir esa acción cada vez que empolla.
Mencionamos este dicho popular porque en esta cuestión que se planteo a raíz de la presentación del concejal Diego León Barreto (electo Intendente), ha pedido de la actual Intendenta Dra. Mónica Tomei, de reflotar un proyecto que hace más de un año estaba encajonado. Podríamos aplicar este dicho para ejemplarizar los hechos.
Estamos hablando sobre el Proyecto de ordenanza que trata la incorporación al nexo 1 de la ordenanza 288/89 como A1 área industrial Sud Este de la ciudad de Funes las siguientes parcelas (…). El área establecida será con exclusividad uso industrial, de equipamiento y logística no permitiéndose su uso habitacional o comercial. Los proyectos tanto el Parque Industrial como así también de las industrias, zonas de equipamientos y logísticas o cualquier otra que deseen instalarse en esa área lo determinara en cada caso el Concejo Municipal. Será nula cualquier aprobación o pre factibilidad aprobada por el Ejecutivo Municipal.
León Barreto, el futuro Intendente de la ciudad de Funes, en su campaña prometía: “que todos estos temas estratégicos para la ciudad de Funes deberá tratarse en un “Concejo Económico Social” y que “no se aprobaría ningún proyecto que afectara el uso del suelo en la ciudad”.
Nos sorprendió a todos, propios y extraños, que de pronto, como una necesidad imperiosa, un mandato u orden del grupo empresarial, le impone, le exige acelerar los trámites y le obligan a sacar del cajón el proyecto enviado por la Dr. Mónica Tomei hace un año y medio al Concejo.
Ahora bien, los argumentos de los concejales que dan su voto positivo para aprobar la ordenanza son: “No podemos estar en contra del desarrollo industrial, vamos a tener un lugar para atender a todos aquellas industrias limpias y empresas responsables que quieran instalarse en la ciudad para generar mano de obra genuina”.
Reconocen que en la actualidad en varios emprendimientos turístico y hoteleros que se habían comprometido esto no se cumple.
¿Dónde están los beneficios para la ciudad?
León Barreto declara: “El beneficio no se si lo voy a ver en mi gestión… Yo hablo de área industrial. Se que hay un interesado. Pero quien venga tendrá que cumplir con las condiciones de la ciudad, y de la provincia. Es ahí, cuando el Estado tiene que intervenir”. Agrega: “Todo el que venga a invertir a esta ciudad pasara tanto por el Ejecutivo como por el legislativo. Ese es el compromiso”. Aquí advertimos una contradicción en sus dichos por lo señalado en el art.3 de la nueva ordenanza cuando dice en su ultima parte: “cualquier pre factibilidad o aprobación por el Ejecutivo Municipal sin la correspondiente ordenanza dictada por el concejo será nula”.
Sobre los beneficios para la ciudad según Barreto: “Todavía no ha llegado esa etapa de la discusión. Si mañana hay un proyecto se le pedirán cosas que deberá verse reflejadas en el otro vértice de la ciudad…Me comprometo a demostrar que habrá beneficios para la ciudad. El tiempo va a demostrar que lo que decimos es verdad”
Es decir, estamos sujetos a una cuestión de FE y a una promesa del futuro Intendente.
Es una cuestión de lógica, nadie va estar en contra de la instalación de un Parque Industrial, pero lo que se vota es otra cosa muy diferente y lo que significa para el “grupo empresarial ese voto positivo, esa levantada de mano, aprobar algo que según el propio Barreto “SENTI QUE HABIA QUE DISCUTIRLO, LO PROPUSE Y EXISTIO EL CONSENSO”.
Este “consenso” fue entre sus pares pero no existió debate, ni consulta a la ciudadanía (ha me olvidaba que ellos son los que nos representan), pero como ciudadanos podemos dar nuestra opinión al respecto.
El eje de la discusión no pasa por el parque Industrial si o parque industrial no. El eje pasa por el “área del suelo”, el cambio de categoría, de rural a industrial, y lo que significa el beneficio que ese cambio trae aparejado para el grupo empresarial y que para Funes no se contempla ningún beneficio, ningún aporte concreto.
Aquí podemos aplicar lo del tero. Nos cambian el eje de la discusión. Esto se hace por ingenuidad, falta de conocimientos, o querer quedar bien con los empresarios inmobiliarios.
Hay un solo concejal, Mauro Miguez que se opone y el argumenta lo siguiente: “La calificación del uso del suelo implica un negocio millonario para el dueño de las tierras, sin beneficio alguno para la ciudad, y que la ordenanza es un traje a medida para un grupo empresarial, que ya propuso hacer un Parque Industrial de 75 ha (proyecto enviado al PEM hace un año).
“La única potestad que tienen los representantes del pueblo para garantizarles los beneficios a los ciudadanos es cuidar la definición de los usos del suelo. Si el suelo pasa de rural a industrial se le esta dando a un solo empresario la llave principal para hacerse de los beneficios de ese paso. Porque una tierra valuada en una condición rural pasaría ahora a estar apta para su comercialización”.
Pero demos un ejemplo en números, según cotización o valor de la tierra, una Ha en zona rural, estaría a unos ... dólares aproximadamente, pasando a la categoría industrial, estamos hablando de unos ... dólares de ha, es decir …... veces más. Y es ahí donde nos preguntamos que beneficio concreto obtiene Funes de esa plusvalía que solo beneficia al grupo empresarial-inmobiliario.
Es el propio concejal Mauro Miguez que agrega: “El estado municipal no tiene política industrial productiva porque no se discutió. No se convoco a nadie. Y esta decisión se tomo de manera extremadamente apresurada con un traje cocido a medida (del empresario). Es una de las decisiones mas graves y mas apresurada de los últimos tiempos. El tiempo nos va a dar la razón en cuanto que esto no va generar beneficios para la población y que el Estado tanto PE municipal como el Concejo Municipal se esta poniendo del lado de los poderosos”.
En una próxima entrega hablaremos de las propuestas superadoras que un grupo de vecinos hemos estudiado en profundidad y daremos a conocer.
Funes, 24 de octubre del 2015.
